Saturday 13 July 2013

De pronto, se fue el amor


Después de visitar a su hijo Pablo, que se ha casado con una hermosa doctora en Leyes en Alemania, Elena, una barcelonesa criada en la burguesía de su ciudad, que acaba de rebasar los cincuenta años y que trabaja en una productora, regresa a su vacía casa de Barcelona profundamente deprimida. Su marido Julio, un prestigioso director cinematográfico, está en Nueva York celebrando el estreno de su última película. Ella sabe que le acompaña una nueva amiga, una jovencita no muy distinta a como ella fue a su edad. Sin saber cómo ni por qué, Elena empieza a llorar todos los días ante las películas sentimentales que se exhiben en los cines de barrio, y algún conocido le concierta su primera cita con un psicoanalista de la Universidad de Rosario, en Argentina, cuyos únicos temas tabú son el feminismo, la religión y los psiquiatras. Así comienzan la serie de sesiones en el despacho de su psicoanalista, “el Mago,” en el “santuario-burdel,” en torno a las cuales gira el hilo de la novela y que provocarán profundamente las pasiones de la paciente al tiempo que el Mago le hace confrontar los miedos y los anhelos que anidan en su interior. ¿Cuál es la validez real del inhumano método empleado por estos “acólitos de Freud”? ¿Sufre realmente Elena de envidia de las mujeres de sus dos hijos? ¿Ha sido herido su narcisismo por la reciente aventura de su marido? ¿Tiene un complejo de castración, causado por su retraimiento, que le hace envidiar la audacia y la pasión vital de sus amigos Eduardo y Andrea? ¿Arranca su frustración del sentimiento del fracaso de su generación frente al ideal de cambiar el mundo? ¿Cuáles han sido, finalmente, los errores y los aciertos en su papel como madre y como esposa?

Elena intentará encontrar la respuesta a estos interrogantes en torno a las tortuosas sesiones de psicoanálisis, que le parecen un juego complicado o una trampa, que tienen lugar puntualmente todas las tardes a las cinco, y a las que acude sin falta, unos días sintiéndose ridículamente sumisa, otros, eufórica, tratando de alguna manera de descubrir cuál es el cocodrilo que se esconde debajo de su cama, la naturaleza del pecado que ha cometido y que la devora por dentro, de hallar un remiendo o un parche que le posibilite seguir adelante, aunque ésta, su nueva vida de “vieja dama indigna” esté lejos de satisfacerla íntimamente. Pronto se dará cuenta de los peligros del juego psicoanalítico, al tiempo que se desarrolla su obsesión con el Mago, al que también denomina “el Impasible” o “el Imperturbable,” debido al doloroso efecto que ejercen sobre ella las “sesiones de castigo” en las que éste apenas le dirige la palabra. Al cabo del tiempo, la sustancia de las sesiones se repetirá en su mente incansablemente, y la novela entera consiste en el intenso monólogo por el que nos narra su experiencia psicoanalítica, y así nos la encontramos imaginando posibles situaciones con su analista, calibrando las historias que le podría contar y las respuestas que obtendría, o incluso concibiendo memorias falsas con las que satisfacer las expectativas freudianas del Mago. La vida es para Elena, al fin y al cabo, como esta novela misma, “un monólogo lleno a partes iguales de farsa y verdad.” Para no volver es una novela sobre la necesidad imperiosa, narcisista, de fantasear nuestras propias vidas, para vivirlas en las palabras y en las imágenes con las que nos las contamos a nosotros mismos, para mantener viva la ilusión de que somos unos seres especiales y de que decididamente merecemos, tal como anhela Eduardo, que una postergada, ansiada sorpresa nos aguarde en el buzón todas las mañanas.

2 comments:

  1. Profunda novela Lorena, gran descripción de personaje y su interiorismo. Enhorabuena!

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    1. Muchas gracias, Mari Paz. Lo cierto es que me encanta Esther Tusquets. No he hablado del ámbito formal de la novela, pero los recursos lingüísticos son excelentes.

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